Menos Rambo, más Ulises

Seguramente el Gobierno de mi País responderá a la marcha de la paz y la justicia con la cantaleta de que que no podemos dejar de atacar a los narcotraficantes, que no podemos darnos por vencidos. Y esto se vuelve un diálogo de sordos. Yo, como ciudadano, NO pido que nos demos por vencidos, lo que pido es que se les combata de forma efectiva e inteligente.
La guerra no es una solución porque no importa cuantos narcotraficantes maten, mientras la venta de drogas sea un negocio tan lucrativo, surgirán nuevos capos para ocupar el lugar de los muertos. El combate debe de ser inteligente, debe de estar enfocado a minar el poder económico de los grupos criminales y encarcelarlos.
Siendo inteligentes se les podría encarcelar por cualquier delito, ya que cometen, no uno, sino múltiples. El mafioso más famoso de los E.U. (Alcapone) no fue encarcelado por sus crímenes, sino por evasión de impuestos.
Otra tarea es terminar con la corrupción, no sirve encerrar a los mafiosos si desde la cárcel siguen dirigiendo sus negocios. Necesitamos castigar a las autoridades coludidas con el crimen, se hacen simulacros de limpiar la policía; en embargo, el poder Judicial se niega a que se implementen medidas antidoping entre jueces, magistrados, etc. Como podrá apreciarse en estos gobiernos derechistas es urgente la desvinculación de los organismos procuradores de justicia del poder ejecutivo.

Todo esto sin mencionar problemas mucho más complejos y difíciles de solucionar como la pobreza, caldo de cultivo de los grupos criminales.

Lo dicho, la mayoría puede forzar a la minoría

Se anuncia la cancelación del RENAUT. El porcentaje de registros anunciados fue sólo ficticio (decían que se tenía el registro de casi el 80%, claro con unos cuantos miles registrados a nombre de Calderón, etc). Se notó claramente que no consiguieron que la población registrara sus celulares y no se atrevieron a cumplir la amenaza de la cancelación masiva de celulares.
Dejaron pasar casi un año para anunciar la cancelación del RENAUT y un poco más para "darse cuenta de lo absurdo de la medida", pero esto demuestra la fuerza que tenemos.

Lo único que empaña mi alegría respecto a esta noticia es que seguramente fueron: la apatía y lo mal que funcionaba el servicio de registro lo que provoco el desaire masivo. Pero de cualquier forma esto nos da la oportunidad de darnos cuenta como podemos cambiar cosas sin necesidad de tomar calles y gritar consignas.